Calibrar, ¿para qué?

Antes de iniciar cualquier programa para bajar de peso y ponerse en forma requiere que usted se pese, ya que éste constituirá un indicador de la efectividad del programa. En casa usted llevará el control de su peso con una balanza casera, la cual tiene una perilla, por medio de la cual usted ajusta el cero, para poder obtener el peso correcto. Si usted no hace esta labor, el resultado no será el correcto y puede que no perciba los resultados de su programa para bajar de peso. El ajuste del cero, constituye la calibración de la balanza.

Calibrar tiene muchos significados, los cuales varían según el ámbito donde este inmerso. Según una de las acepciones del diccionario de la real academia de la lengua española significa

“Ajustar, con la mayor exactitud posible, las indicaciones de un instrumento de medida con los valores de la magnitud que ha de medir” (1)

De manera tal que cuando calibramos ajustamos el “factor de calibración” de nuestro instrumento, para obtener resultados en una determinada magnitud, razón por la cual en la metrología (Ciencia que tiene por objeto el estudio de los sistemas de pesas y medidas) se prefiere el término de ajuste de la calibración.

Cada sistema analítico es diferente, por lo que cada uno de ellos requiere de una calibración. Incluso si usted dispone de dos instrumentos iguales, cada uno debe ser calibrado de manera independiente, ya que los componentes presentan leves diferencias inherentes a cada componente y debidas al desgate de éstos. Por lo que constituye un error transferir los factores de calibración de un instrumento a otro, aunque estos sean iguales.

“Ajustar, con la mayor exactitud posible” significa que debemos emplear un material de calibración de mayor nivel metrológico posible. Mientras mayor sea el nivel, mayor será la exactitud del material, por lo que será mayor la exactitud que le daremos a nuestro instrumento. Un material de calibración al que se asignaron valores con un método definitivo, es el de mayor nivel metrológico, sin embargo estos son escasos y resultan muy costosos.

Para la rutina del laboratorio es suficiente con que sean asignados con métodos de referencia, los cuales presentan una exactitud superior a los métodos de rutina o método seleccionado. En la realidad, la asignación de valores con un método seleccionado es aceptable, siempre y cuando su trazabilidad este garantizada. De manera tal que el fabricante del material de calibración debería asignar valores al material con metodologías de referencia o seleccionada.

Al calibrar con el material apropiado se logra obtener exactitud en los resultados (otorgar el valor verdadero al resultado), y le daremos la armonía a los resultados analizados por nuestro instrumento.

Si usted quiere que su laboratorio emita resultados exactos, requiere utilizar materiales de calibración acordes a sus instrumentos, que los puede obtener del fabricante del instrumento u otra compañía encargada de la fabricación de materiales de calibración.

Alfredo Gallardo Acevedo
Octubre de 2007

Referencia

1 DICCIONARIO DE LA LENGUA ESPAÑOLA – Vigésima segunda edición. Real Academia Española. 2002

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